EL DISEÑO COMO VOCACIÓN

En Miami, ciudad tan provinciana como cosmopolita, cualquier cambio que ocurra en sus múltiples rostros, se evidencia fácilmente. Y el perfil de Ediciones Universal ha variado para bien en los últimos tiempos, y todo gracias al trabajo gráfico de Luis García Fresquet, quien tiene a su cargo desde hace tres años el diseño de la mayoría de las cubiertas de los libros de la casa editorial.


El artista sabe que su labor ha sido muy positiva, y eso se aprecia al mostrar con satisfacción su legado en la computadora y explicarnos lo engorroso que a veces resulta diseñar las portadas de los libros: “En ocasiones un escritor quiere que un elemento aportado por él aparezca en la portada, y eso dificulta la composición, aunque en otras sirve como punto de partida para la creatividad”, apunta Fresquet, quien considera que para lograr una buena portada: “Es importante haber leído el libro, y a partir de ahí buscar una imagen que refleje la esencia del texto, haciéndola lo más atractiva posible, de forma tal que a el lector le agrade el diseño y le invite a leer la obra”. 
 
Luis García Fresquet comenzó su carrera en la prensa habanera en 1960, luego estudió diseño gráfico en la capital cubana, su ciudad natal, y se desempeñó en su rama en la revista Cuba Internacional, en varios semanarios humorísticos y en la Revista de la Universidad de La Habana, hasta que salió al destierro vía España. Allí trabajó en la Editorial Playor (...). En su nueva etapa de exiliado, ya en Miami, (...) comenzó su vínculo con Ediciones Universal. “Tengo que reconocer que el editor (...) me ha dejado realizar (...) un diseño más contemporáneo, actualizado y acorde a las técnicas más modernas (...). Considero que he establecido un estilo propio para esta editorial, un rostro de diseño para (...) una de las casas más importante de habla hispana en los Estados Unidos, (...) que ha logrado mantener la cultura cubana en el exilio”.

(...). Su vocación [por las artes plásticas] no es adquirida, (...) nació con él. Su éxito lo ha conseguido gracias al estudio minucioso de todas las técnicas posibles y a un espíritu de dedicación al oficio. Reconoce que la tecnología avanza a pasos agigantados y que los recursos gráficos aportan elementos deslumbrantes en la actualidad: “Pienso que (...) de nada valen las computadoras, los sofisticados programas, las posibilidades ilimitadas de combinar los colores digitales, entre otras cosas, sin el talento del artista”.

(...). El trabajo de este diseñador cubano ha sido tan elogiado y valioso, que ya se va haciendo difícil concebir un libro de Ediciones Universal, en que no aparezca la nota que diga: “Diseño de la cubierta de Luis García Fresquet”.

Luis de la Paz

Fragmentos del artículo publicado el 29 de marzo de 2002 en el Diario Las Américas.